Me dije a mí mismo que iba a dejar de follarme a esta colegiala asiática que vivía a unas cuadras de mi casa, pero parece que no puedo dejar de pensar en lo dulce que es su coño. Después de que terminé de ayudarla con su tarea, ella chupó y montó mi larga polla hasta que me corrí dentro de su dulce coño.
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